Título: ¿SUEÑAN LOS HUMANOS CON
ANDROIDES CARIÑOSOS?
Autor: JUAN IGNACIO MONTIANO
Editorial: ATLANTIS
Trama: En un Bilbao futuro en el que el
Guggenheim es la sede de la más importante empresa mundial dedicada a la robótica,
a un hombre que ha tocado ya fondo y ha sido expulsado de casa por su mujer le
toca una inmensa cantidad de dinero en la lotería. Decidido a cumplir sus
sueños, se compra una gran mansión y encarga a la empresa citada dos androides
femeninas capaces de satisfacer todos sus caprichos. Pero cuando su exmujer
aparece para exigirle su parte del premio las cosas se le complicarán, sobre
todo cuando pocos días después sea asesinada.
Personajes: Pablo Artola, un tipo más bien abúlico, sin iniciativa, que
estudió Egiptología por estudiar algo inservible, en su propia opinión, y al
que su mujer abandona cuando ha tocado fondo, Alejo Gogoazabal, comercial de
Androideak, S. Coop, la cooperativa más importante en el mundo de la robótica,
agresivo en su trabajo y aficionado al juego y las mujeres, Luisa
Gartzia-Otwen, policía ya madura, que ha entrado en la cuarentena, y al mismo
tiempo que investiga lo sucedido inicia una relación con Arkaitz, secretario de
un juzgado, atento y cariñoso, casi casi el hombre perfecto, Txomin, sicario de
una empresa dedicada al préstamo a gran interés y al cobro de morosos, Clara y
Luna, androides femeninas tan perfectas que parecen humanas.
Aspectos a Destacar: La interesante y divertida
manera que tiene el autor de jugar con las famosas “tres leyes de la robótica”
establecidas por Isaac Asimos, a través de una novela que conjuga la
ciencia-ficción o anticipación con una trama de intriga que, salvando las
distancias temporales, podría ocurrir --y seguramente está ocurriendo delante
de nuestras narices más a menudo de lo que pensamos-- hoy en día en nuestra
propia ciudad.
La Frase: ¿En realidad qué somos nosotros,
los humanos? Un complejo mecanismo anatómico y bioquímico, una máquina al fin,
muy sofisticada pero una máquina que tiene fecha de caducidad. Nos hemos
inventado hstorias fantásticas para creernos mejores que los androides, nos
hemos inventado a Dios y nos hemos inventado el alma… paparruchas, mentiras,
dilaciones para que los estúpidos vivan jodidos pero contentos, pobres pero
honrados, pensando en una recompensa después de la muerte. ¡Ja!, después de la
muerte a tirar la bolsa de palomitas y a la puta calle, porque se acaba la
película.