martes, 9 de agosto de 2011

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 287.-AL BORDE DEL PACÍFICO (ROSS THOMAS)


Título: AL BORDE DEL PACÍFICO
Título original: OUT ON THE RIM
Autor: ROSS THOMAS
Editorial: JÚCAR
Trama: Un analista especializado en terrorismo, que acaba de ser despedido para la “fundación” en la que desempeñaba sus servicios, es contratado para que dirija una operación cuyo resultado final sería la compra y el subsiguiente exilio dorado en Hong Kong de un líder guerrillero filipino. Pero es mucho el dinero necesario para comprarle, lo que desatará las intrigas y ambiciones de muchos personajes que pululan por ese país asiático.
Personajes: Booth Stalling, hombre viudo, escéptico y tranquilo, especialista en terrorismo despedido a causa de ajustes presupuestarios de una extraña fudación, antiguo combatiente en Filipinas que luchó junto a Al Espíritu, envejecido líder guerrillero que mantiene viva en una región de Filipinas la llama de la Revolución, Artie Wu, norteamericano de origen chino que pretende tener derechos a la corona imperial china y su compañero Durant, criados juntos en un orfanato y que siempre están dispuestos a meterse en problemas por una buena comisión, “Otherguy” Overby, buscavidas apodado de ese modo porque siempre que le detienen la culpa resulta ser de “otro tipo”, Carmen Espíritu, joven decidida y ambiciosa, esposa de Al aunque se hace pasar por su nieta, Georgia Blue, antigua agente del Servicio Secreto, ayudante de Stalling en la operación, eficaz e incluso letal.
Aspectos a Destacar: En clave de comedia, aunque sin desdeñar las situaciones duras, y poniendo en escena un elenco de personajes a cada cual más pícaro, Ross Thomas, un autor injustamente desconocido en España, nos descubre ciertos entresijos de la política internacional no muy recomendables.
La Frase: Sabía que los niños tendrían mucha suerte si se quedaban con diez centavos del dólar que les acababa de dar. El resto iría a parar a los policías y sindicatos para quienes trabajaban. Wu sabía también que si lograban seguir vivos un año más o dos, el sindicato quizás podría hacerlos engordar un poco y prostituirlos.