Los detalles
de su vida antes y después de ser prefecto de Judea y de, según los textos
bíblicos, tomar parte en el proceso contra Jesús son casi por completo un
misterio o se basan en suposiciones difíciles de certificar, un caldo de
cultivo perfecto para convertirle en novela. Es lo que ha hecho Tito Murua
en Poncio Pilatos, un primer libro dentro de su recién iniciado
camino por la literatura que se presenta hoy a las 20.00 horas en Dendaraba
(Vitoria-Gasteiz), un acto de acceso gratuito que contará con la participación,
entre otros, del artista Mintxo, que acompañará con distintas imágenes a
la palabra.
Otorrinolaringólogo
con 35 años de profesión y apasionado de la historia, es ahora cuando se
adentra en el mundo de las letras aunque
al principio no era consciente de dónde me estaba metiendo, confiesa. De
hecho, que su primera obra vea la luz ha llevado su tiempo, cuatro años de
escritura y correcciones, y otros cinco para encontrar una editorial, que al
final ha sido Hiria.
La gente lectora lo que más busca, o
eso creo, es entretenimiento y aprendizaje. Yo he procurado unir las dos cosas,
es decir, ser entretenido, que pasen muchas cosas, que no decaiga el ritmo y
muy asequible para todo tipo de público, y que, además, estar bien documentado
para que la gente se apasione por la historia. Y si ya consigo que
literariamente le guste al lector, que encuentre una novela aceptablemente bien
escrita, pues eso sería el sumun, apunta el también coordinador de comunicación en el
Hospital de Santiago.
Para
conseguir estos objetivos, Murua recrea toda la vida de un Pilatos al
que el escritor transforma en un resentido por las diferentes catástrofes que
le van pasando, un personaje que antes de llegar al momento relatado por la
Biblia vive con una madre dominante y posesiva, que sufre siendo niño una
experiencia muy negativa con un amigo, que es golpeado por el desamor de una
romana, que es hecho prisionero tras una batalla... Le he creado una vida en la cual pasan muchas cosas, desde bélicas
hasta eróticas, amorosas, de suspense, de robos, de apuestas... para llegar a
ese momento de la Pasión en la que se ve al romano, a cómo vive él todo eso,
relata.
Personajes
de ficción y otros reales se reúnen así en una historia que termina en
Alejandría, con un Pilatos ya mayor decidiendo si se quita la vida, momento en el que realiza una serie de reflexiones
sobre el amor, la generosidad, la bondad para darse cuenta de que hay demasiada
maldad en la gente; es una persona que puede llegar a ser odiado pero que en
realidad es alguien decepcionado, agnóstico de la vida. En el fondo, aunque
pasan muchas cosas a lo largo del libro, es una novela psicológica.
Ahora es el
momento de que su creación pase a manos de los lectores y le deje de
pertenecer. Ha sido un parto largo,
dice con una sonrisa, aunque reconoce que es una experiencia que le gustaría
repetir. Ojalá, comenta. Si me pongo a ello, algo saldrá porque
imaginación no me falta y ganas creo que tampoco. Todo llegará.
Artículo publicado el 18 de abril de
2013 en el periódico NOTICIAS DE ÁLAVA (http://www.noticiasdealava.com/).
Redactor: C. González. Fotografía: J. C.