jueves, 26 de septiembre de 2019

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 721.-LA VERDAD SOBRE EL CASO HARRY QUEBERT (JOËL DICKER)

Título: LA VERDAD SOBRE EL CASO HARRY QUEBERT
Título original: LA VERITÉ SUR L’AFAIRE HARRY QUEBERT
Autor: JOËL DICKER
Editorial: RANDOM HOUSE MONDADORI
Trama: Un escritor cuya primera novela fue un éxito, pero que se encuentra en horas bajas, aquejado del síndrome del papel en blanco, acude junto a su antiguo mentor, conocido por una obra que en su momento fue el culmen de la novelística norteamericana, para que le ayude y asesore. Pero cuando en el jardín de la casa del citado mentor se encuentra el cadáver de una joven de quince años desaparecida décadas atrás, nada volverá a ser como antes, ni en sus vidas ni en su relación.
Personajes: Marcus Goldman, joven escritor que pasa por una crisis ya que no consigue escribir nada nuevo tras su éxito anterior, Harry Quebert, escritor y profesor de Goldman, cuya segunda novela eclipsó a todas las demás, Nola Kellergan, joven quinceañera que se enamora de Quebert y le sirve de inspiración, el reverendo Kellergan, pastor del pueblo en el que transcurre la acción, padre de Nola, Luther Caleb, hombre de aspecto deforme, chófer del propietario de la vivienda en la que reside Quebert, Gahalowood, agente de la policía estatal que investiga el crimen, aparentemente escéptico y huraño, Robert, Tamara y Jenny Quinn, los primeros matrimonio, él ingeniero y ella propietaria de una hamburguesería, mujer dominante que desea a toda costa que su hija Jenny se case con Quebert, del que la propia Jenny está enamorada.
Aspectos a Destacar: El autor, a través de un conseguido thriller, que en ningún momento pierde su interés gracias a los giros y sorpresas que se producen a lo largo de la novela, aprovecha para hacer una reflexión sobre la propia literatura, sus virtudes, sus engaños y su necesidad, en el caso de que esta última exista.
La Frase: El privilegio del escritor, Marcus, es que puede ajustar cuentas con sus semejantes gracias a su libro. La única regla es no citarlos directamente. Nunca por su nombre: es una puerta abierta a denuncias y tormentos.