jueves, 17 de julio de 2014

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 471.-NIEBLA SOBRE EL PUENTE TOLBIAC (LEO MALET)


Título: NIEBLA SOBRE EL PUENTE TOLBIAC
Título original: BROUILLARD AU PONT DE TOLBIAC
Autor: LEO MALET
Editorial: EDICIONES B
Trama: Un hombre cuyo nombre no le suena envía una carta al detective parisino Nestor Burma avisándole de que algunos antiguos compañeros, de cuando militaban en un grupo anarquista, están en peligro. Cuando por fin el detective consigue ponerse en contacto con su misterioso interlocutor, éste ha muerto asesinado y tendrá que iniciar una investigación no sólo para descubrir al asesino sino para impedir que se cometa alguno más con los excompañeros amenazados.
Personajes: Nestor Burma, antiguo anarquista reconvertido en detective privado, considerado como “el hombre que pone K. O. al misterio”, Belita Morales, joven y hermosa gitana que ha intentado independizarse de su familia, amiga del anarquista asesinado, Salvador, miembro del “clan” al que pertenecía Belita, machista, violento y agresivo, el inspector Fabre y el comisario Faroux, policías que vigilan a Burma, del que no se fían del todo pese a darle cierta libertad para actuar, Baurénot y Deslandes, antiguos compañeros de Burma y del hombre asesinado, devenidos en empresarios de éxito, Lacorre, veterano anarquista partidario de actuar fuera de la legalidad.
Aspectos a Destacar: Antes de que Manchette y su generación crearan el “néopolar”, Malet ya había consolidado una obra que se inició en la época de la ocupación alemana, con lo que ello suponía / “Niebla sobre el Puente Tolbiac” está considerada como la mejor de sus obras dedicadas a Burma y es parte de su serie dedicada a “Los nuevos misterios de París”, cada una de cuyas novelas está dedicado a un barrio o distrito de la capital francesa.
La Frase: El empleado fue a abrir un armario frigorífico del cual sacó una camilla con ruedas sobre la que yacía una forma rígida, tapada con una sábana. Una de las ruedas rechinaba al girar sobre el suelo de cemento. Pensé que hasta aquel momento sobre todo había notado ese ruidoso defecto en las ruedas de los cohecitos para niños. Pues bien, cochecito para niños en un extremo y camilla mortuoria en el otro, el rizo estaba rizado.