Título: EL CRIMEN DEL SISTEMA MÉTRICO
DECIMAL
Autor: MIGUEL IZU
Editorial: BERENICE
Trama: Año 1.849. Cuando está a punto
de aprobarse una ley de Pesos y Medidas que implantará en España el sistema
métrico decimal, algo “revolucionario” que tiene en contra a los sectores más
reaccionarios y tradicionalistas de la sociedad, el ministro que la impulsa y
el diputado que la va a defender en el Congreso sufren un atentado, del que
afortunadamente salen ilesos aunque mueren dos de sus ayudantes y uno de los
terroristas. Un comisario con poca experiencia se hará cargo del caso, con el
convencimiento de que el atentado lo han impulsado enemigos de la nueva ley.
Pero quizás haya algo más que una simple cuestión de pesos y medidas.
Personajes: Pedro Arróniz, antiguo militar de ideas moderadamente
progresistas que, tras regresar de Cuba, es nombrado comisario de un distrito
de Madrid, a pesar de su inexperiencia, Elena, joven viuda de ideas avanzadas,
con la que pretende intimar Arróniz, Rodríguez, celador de uno de los barrios
del distrito dirigido por Arróniz, honrado, leal y con sentido común, Enciso, jefe
superior de policía de Madrid, más preocupado por la política que por hacer
bien su trabajo, Arteta, exmilitar que tuvo bajo su mando a Arróniz, al que
recomendó para que fuera nombrado comisario, diputado del partido gubernamental
y leal al ministro, Tomasa, regente de una pensión madrileña que no hace ascos
a saltarse la ley si le conviene, Alcolea, subordinado de Arróniz, eficiente y
buen trabajador.
Aspectos a Destacar: La descripción de una
época, mediados del siglo XIX, en la que se intentaba modernizar España, con
avances como el ferrocarril o la adaptación de los diferentes modos de pesar y
medir a unos más racionales, lo que podía generar tensiones que, en realidad,
no eran sino excusas para ocupar el poder.
La Frase: Recuerda algo que dice Poe en su
relato. Lo más importante es saber qué se debe observar, la calidad de la
observación suele ser más importante que la validez de las deducciones que
puedas hacer sobre la información que hayas obtenido. A lo mejor necesitas dar
un paso atrás para tener una visión de conjunto y replantearte qué es lo que
has estado observando hasta ahora. Si, como me dices, hay una conspiración y no
sabes de quién fiarte, empieza por preguntarte qué es lo que te han venido
contando hasta ahora personas de las que quizás no debes fiarte y que no puedes
tener por cierto.