Aunque no se prodiga mucho en el género, José Miguel Fernández Urbina, profesor universitario en la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación en la UPV (Universidad del País Vasco), es uno de los primeros escritores vascos en lengua castellana que ha utlizado el género negro, como cauce de expresión de sus historias.
ACCIÓN DIRECTA
Xabier Aiestaran es un hombre incapaz de aceptarse a sí mismo. Acomplejado y contradictorio, despreciado por su padre y ninguneado por su novia y compañeros de lucha política, profesor universitario que plagia su tesis doctoral para disimular sus carencias académicas, homosexual oculto, paranoico y violento, para el que la entrega a la causa nacional es el único objetivo de su vida, cruza la raya divisoria entre la salud y la inestabilidad mental e instalado en una paranoia febril causada por su temor a haber sido infectado por el virus del Sida, decide él solito, llevarse por delante a todo aquél que se oponga a su idea de Euskadi, incluyendo entre sus objetivos a cualificados dirigentes del MLNV (Movimiento de Liberación Nacional Vasco), con la pretensión de constituir un ejemplo de la lucha contra los opresores del pueblo vasco, única manera de dar algún sentido a su patética existencia.
EL BOBO FEROZ
El bobo feroz narra una tragedia colectiva en Bilbao, cuyo desencadenamiento y desenlace solo son posibles por la omnipresencia del fenómeno terrorista. Pero El bobo feroz, es también una sátira del declive del fanatismo, que estimula la metamorfosis de los pistoleros en pícaros y de los demagogos en dementes. Asimismo, El bobo feroz recrea las paradojas de unos cuerpos desdichados, puesto que los protagonistas son un judoka a quien el destino le mantiene quieto trabaja de vigilante en un aparcamiento, y una pintora a quien su inquietante fatalidad la determina a ganarse la vida en un espectáculo de lucha libre. La tragedia y la comedia se confabulan en esta novela para desentrañar las no pocas ataduras que condicionan la vida de los protagonistas aunque estos traten de ignorarlas. El espectro de ETA condiciona la trama y el clima de la novela.
