LA NOVELA: Miren Azpeleta, una adolescente de 16 años, aparece
colgada, acuchillada y con los párpados pegados en el campus de Leioa, en la
Universidad del País Vasco. ¿Asesinato pasional? ¿Ajuste de cuentas? ¿Un caso
aislado?
Una muerte
sin explicación aparente que lleva a la policía y a la periodista Lucía Ferrer,
encargada de cubrir el suceso, a trabajar a contrarreloj, pues el juego de un
aciago asesino que firma con dos iniciales, W.C., y distintas fechas, ha
comenzado. Un juego movido por una bendita palabra que será largo y duro.
Una novela
ambientada en el Gran Bilbao donde un homicida sin escrúpulos causa el caos
poniendo en jaque a la policía autónoma vasca, a la prensa y a la población.
Una historia en la que nada es lo que parece y donde unos y otros ocultan
secretos, mentiras y fantasmas del pasado que serán clave en la resolución del
caso. Una obra en la que todo aquel al que le guste adivinar quién es el
asesino, jugando al descarte y el despiste, se lo pasará en grande. No obstante
no resolverá el puzzle fácilmente.
Bendita
palabra es una historia en la que nada
es lo que parece y donde unos y otros ocultan secretos, mentiras y fantasmas
del pasado que serán clave en la resolución del caso.
LA AUTORA: Verónica García-Peńa nació en Okendo (Araba/Álava)
en 1979. Vivió su nińez y juventud en un pequeńo pueblo vizcaíno llamado Zalla
hasta que en 2004, se trasladó a La Rioja, donde reside actualmente.
Es licenciada en Sociología y
Periodismo por la Universidad del País Vasco y ha desarrollado su carrera profesional
como socióloga para distintas instituciones públicas, y como periodista en
medios de comunicación riojanos hasta 2009. Ese ańo decidió que había llegado
el momento de comenzar una carrera de fondo que hoy empieza a dar sus frutos
con la publicación de su primera novela.
La
novela, galardonada como accésit en el I Certamen Literario Nemira, está publicada,
de momento, en edición digital.