Título: ASESINATO
EN CONCARNEAU
Título
original: BRETONISCHES VERMÄCHTNIS
Autor: JEAN-LUC BANNALEC
Editorial: GRIJALBO
Trama: La muerte violenta de un médico, en la apacible
localidad bretona de Concarneau obligará al comisario Dupin a investigar el
asesinato, con el inconveniente de que en la población todo el mundo les
conoce, tanto a él como al difunto, lo que supone una presión añadida. Sobre
todo cuando descubre que no era un simple médico sino que estaba metido en un
buen número de negocios, además de ser coleccionista de arte.
Personajes: Comisario
Dupin, policía parisino destinado en Bretaña, a la que se ha adaptado
enseguida, Madame Chaboseau, mujer del hombre asesinado, orgullosa y
prepotente, Felix Chaboseau, hijo del hombre asesinado, con el que apenas tenía
relación, Rosa Le Menn e Iris Nevou, nuevas subordinadas de Dupin,
disciplinadas aunque con iniciativa, Nolwenn, secretaria de Dupin, su auténtica
mano derecha a la hora de resolver problemas, Le Ber, subordinado de Dupin, un
hombre enamorado de su tierra que lo sabe todo sobre Bretaña, Evette Derrien,
médica que compartía consulta con el asesinado y que esperaba quedarse con la
consulta cuando él la dejara, Kler Kireg, joven alcalde de Cocarneau, político
a tiempo completo, Jodoc Luzel y Brecan Priziac, socios del médico fallecido en
varios de sus negocios, el primero experto en la elaboración de cervezas, el
segundo farmacéutico.
Aspectos
a Destacar: El autor, un alemán que
escribe con pseudónimo, está enamorado de Bretaña y nos las muestra en todas
las obras que ha dedicado al comisario Dupin, siendo ésta una de las más
significativas en ese sentido / La novela es, además, un homenaje a Georges
Simenon, el padre literario del comisario Maigret, que también hizo acudir a su
personaje a Concarneau para investigar el asunto narrado en la novela “El perro
canelo”.
La Frase: Da heul al labour emañ ar boued! Ese era
uno de los dichos bretones más sabios que Dupin conocía. Tenía doble
significado. El primero --tras el trabajo viene la comida--, era de por sí muy
importante, pero el segundo significado --la comida debe estar a la altura del
trabajo-- lo superaba. Venía a decir que cuando se trabaja mucho y duro, la
comida debe ser especialmente sabrosa y las raciones, generosas.