Título: EL BLANCO MÓVIL
Título original: THE MOVING TARGET
Autor: ROSS MacDONALD
Editorial: RBA
Trama: La desaparición de Sampson, un millonario tejano afincado en California
que al principio parece voluntaria, se complicará cuando se reciba una nota
solicitando un rescate a la familia si desean que vuelva a casa sano y salvo.
Lew Archer, antiguo miembro de la inteligencia militar y expolicía, que trabaja
como detective, será el hombre elegido para intentar desentrañar el asunto, a
ser posible, sin que los secuestradores cumplan sus amenazas.
Personajes: Lew Archer,
detective protagonista de las novelas de Ross MacDonald, digno sucesor de
Philip Marlowe aunque más escéptico y desilusionado que éste, si cabe, Miranda
Sampson, hija del hombre secuestrado, insegura e inestable, enamorada de Alan
Faggert, piloto civil y empleado de Sampson, Fay Estabrook, actriz de Hollywood
con un pasado glorioso y un presente mediocre, Claude, falso gurú que regenta
un centro espiritual en unos terrenos cedidos por el hombre secuestrado, Elaine
Sampson, esposa de Simpson, el millonario secuestrado, en silla de ruedas desde
que tuvo un accidente mientras cabalgaba, cínica y resentida, Bert Graves,
exfiscal y abogado, amigo y antiguo jefe de Archer en el ejército, enamorado de
Miranda Sampson, Troy, hombre de origen británico que regenta un piano bar y
que parece estar metido en asuntos oscuros, Félix, chófer de Sampson de origen
filipino, reservado y silencioso.
Aspectos a Destacar: Ross MacDonald es un especialista, en sus novelas, en desbaratar las
ilusiones del sueño americano y, sobre todo, en ahondar en los conflictos que se
abaten sobre las aparentemente modélicas familias tradicionales americanas,
sobre todo aquellas en las que el dinero ha sustituido al afecto.
La Frase: Cuando entré en la policía creía que el mal era una cualidad con la que
algunos habían nacido, como un labio leporino. El trabajo de policía consistía
en descubrirlos y quitarlos de en medio. Pero el mal no es algo tan simple.
Todo el mundo lo lleva dentro de sí, y que éste salga a la luz depende de una
serie de circunstancias. Entorno, oportunidad, presiones económicas, una pizca
de mala suerte, un mal amigo. El problema estriba en que un policía tiene que
juzgar a los demás casi a dedo y actuar inmediatamente.