domingo, 25 de mayo de 2014

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 466.-LOS CASOS DE HIROTO MATSUMOTO. EL CASO DE LAS GEMELAS TRAVIESAS Y DE LAS SONRISAS MUERTAS (FRANCISCO RUEDA MEDINILLA)

Título: LOS CASOS DE HIROTO MATSUMOTO (EL CASO DE LAS GEMELAS TRAVIESAS Y LAS SONRISAS MUERTAS)
Autor: FRANCISCO RUEDA MEDINILLA
Editorial: NEVERLAND EDICIONES
Trama: La muerte, en un caso evidente de asesinato, de un ciudadano japonés desconcierta a la policía de Barcelona, que no dudará en solicitar la colaboración de un estrafalario detective al que, por ser de ascendencia japonesa, consideran especialista en los asuntos criminales en los que intervienen personas de ese mismo origen. El detective aceptará de buen grado colaborar con la policía mientras, simultáneamente, tendrá que ocuparse de varios de sus familiares que también parecen estar metidos en unos buenos líos.
Personajes: Hiroto Matsumoto, obeso detective de origen japonés y nacionalidad española, amante del manga y del anime así como de la cultura mediterránea, Andrea, su ayudante, una pelirroja animosa que no quiere ser una simple secretaria y ansía convertirse también en detective, Paco Rueda y Rebeca Ríos, jóvenes detectives que trabajan para Hiroto como "becarios", él regordete, amante de la comida, especialista en disfraces y enamorado sin esperanzas de Rebeca, ella una mujer fuerte, hermosa y decidida, exmilitar que ha decidido reciclarse como detective, Virtudes Pomares, obesa inspectora de policía con una de las más elevadas estadísticas de resolución de casos criminales, lesbiana y casada con una modelo despampanante, Kazuo, hermano cocinero de Hiroto, autoritario y ególatra, Tami y Tani, gemelas, hermanas pequeñas de Hiroto, traviesas, frívolas y algo atolondradas, Felipe, dueño de un bar al que acude Hiroto a menudo, de origen andaluz y acérrimo defensor del independentismo catalán.
Aspectos a Destacar: La creación de un personaje atípico en la novela negra española, un detective barcelonés originario del Japón e integrado en el país, trasunto de los cambios sociológicos que se están produciendo en los últimos años en la composición demográfica de la sociedad española / El sentido del humor que no sólo recorre toda la novela de un modo muy eficaz y adecuado, sino que llega al punto de que el propio autor presta su nombre y apellido a uno de los personajes, con una capacidad de reírse de sí mismo que hace que también el lector no pueda evitar sonreírse e identificarse con él.

La Frase: Todo eslabón de una organización mafiosa se movía por el temor a los mandos superiores, los cuales sabían qué debían hacer para labrarse una reputación de modo que ni los amigos ni los enemigos se atrevieran a atentar contra ellos. El miedo a represalias y venganzas hacía que la gente no quisiera colaborar con la policía ni meterse en líos con gente que le daba un trabajo o un techo donde vivir aunque fuera a base de explotarles al máximo.

UNA DEL OESTE: ARTÍCULO PUBLICADO EN EL DIARIO "GARA"

UNA DEL OESTE EN EL PERIÓDICO GARA (25/03/2014)

El género negro se cruza con el western en la última novela de José Javier Abasolo
Un comerciante bilbaino al que le gusta escribir novelas del oeste es asesinado. A partir de ahí, las líneas escritas por el fallecido y la investigación policial se entrelazan en una original novela negra de José Javier Abasolo.
NAGORE BELASTEGI DONOSTIA

DOS HISTORIAS. «Una del oeste» une dos novelas en un solo libro; una corta ambientada en un poblado vaquero de Wyoming (EEUU) y otra más extensa sobre un asesinato en Bilbo.
Aunque los géneros de novela negra y western tengan poco en común, el bilbaino José Javier Abasolo ha sabido empastar los dos en «Una del oeste» (Erein), su último libro que forma parte de la colección «Cosecha Roja» dedicada a las historias policiacas.
«El lector dirá si encaja y si tiene coherencia. Yo he disfrutado mucho escribiendo la novela», explicó el autor. De hecho, ha unido un género que ya le es habitual, el policiaco, con uno que le apasionaba desde niño, el de los libros de aventuras del oeste. Para ello ha enlazado dos líneas argumentales, una dentro de la otra. «Hay dos planos. Por una lado está un escritor de libros del oeste que se gana la vida con su comercio. Es un cincuentón poco seguro de sí mismo que cree que su novia, varios años más joven que él, le va a abandonar. Resulta que ese personaje es asesinado en un atraco y ahí empieza el segundo plano, la investigación», contó.
Según Abasolo, parece que la historia será resuelta fácilmente y que no irá más allá, porque saben quién es el presunto culpable, saben las razones y lo capturan rápido, pero el juez encargado, un novato, decide que no le cuadra la historia y ordena continuar con la investigación. Por otro lado, el editor del hombre asesinado cree que esta será la oportunidad de publicar todos los textos que el malogrado escritor tenía en la recámara y venderlos con éxito debido al morbo.
En cuanto a la parte western -que se diferencia tanto por el lenguaje como por la tipografía, y ocupa menos de una tercera parte del libro completo, aunque los capítulos están mezclados con la historia principal- está llena de tópicos. «Se me ocurrió meter la novela del oeste porque de joven leía mucho ese género. Es como un homenaje pero con sentido del humor. La he introducido con todas las consecuencias. Aparece el forastero, que es el pistolero más rápido, y conoce a la chica; un sheriff; una matanza de indios...», afirmó José Javier Abasolo.
Goiko, para otra vez
Este es el décimo segundo libro que Abasolo publica. «Una del oeste» es el cuarto en cinco años, y también los anteriores forman parte de la colección «Cosecha Roja» de Erein. En «Pájaros sin alas» (2010, traducida al euskara y ucraniano), «La luz muerta» (2012) y «La última batalla» (2013) el protagonista es el inspector Goiko. Esta vez, en cambio, ha optado por dejar ese personaje de lado. «Tras el primer libro los dos siguientes me salieron solos, pero si siempre acudes al mismo personaje corres el riesgo de repetirte. Además, me parecía deshonesto meter a Goiko con calzador en esta historia porque no encajaba», afirmó Abasolo. Sin embargo, Goiko volverá en alguna próxima historia que ya tiene en mente.

Lo que no ha cambiado y habitualmente se repite en sus libros es el escenario, Bilbo. «Es la ciudad que más conozco. Así no tengo que investigar», explicó. A la espera de la respuesta del público, cree que la novela negra siempre gusta, especialmente en época de crisis, porque «una novela negra mala puede despertar igualmente nuestro interés por la intriga».