Título: DOBLE
Título original: DOUBLE
Autor: BILL PRONZINI & MARCIA
MULLER
Editorial: JÚCAR
Trama: El detective Sin Nombre acude, a
regañadientes y a instancias de su socio, a un hotel en el que se celebra una
convención de detectives privados. Allí coincidirá con una joven amiga y
colega, Sharon McCone, que se encuentra preocupada tanto por su vuelta a su
ciudad natal como por la situación de una amiga que parece estar en problemas.
Para intentar averiguar lo que ocurre solicitará la ayuda del “Sin Nombre” que,
por su cuenta y riesgo empezará a husmear intrigado por la estancia en el hotel
de una madre y un hijo que no están debidamente registrados.
Personajes: El detective “Sin Nombre”,·personaje habitual de Pronzini,
expolicía cincuentón, no en muy buena forma, empedernido coleccionista de
“pulps” antiguos, Sharon McCone, personaje de Marcia Muller, joven y entusiasta
detective, originaria de una típica y tradicional familia irlandesa, Elaine
Picard, antigua jefa de McCone, a la que guarda gran aprecio, pese a ser de
carácter severo, jefa de seguridad del hotel en el que se celebra la
convención, Lloyd Beddoes, director del hotel del que Picard es jefa de
seguridad, preocupado exclusivamente por el buen nombre del establecimiento, Víctor
Ibárcena, ayudante de Beddoes, siempre dispuesto a hacer lo que le ordena su
jefe, Jim Lauterbach, jefe de la policía que nunca está cuando se le necesita
ni se le espera en ningún momento, Rich Woodall, extraño amigo de Elaine
Picard, de carácter violento, Karyn Sugarman y June Paxton, amigas de Elaine y
compañeras de ella en una asociación de mujeres directivas y emprendedoras, Henry
Nylan, antiguo militar reconvertido en político, con ideas próximas a la
“mayoría moral”, arrogante y orgulloso.
Aspectos a Destacar: En esta novela dos de los
más importantes escritores de novela negra norteamericana de la década de los
80, Bill Pronzini y Marcia Muller, unen sus personajes emblemáticos, algo
bastante habitual en Estados Unidos aunque prácticamente desconocido en otros
lugares, en una novela en la que se turnan en capítulos sucesivos el
protagonismo de cada uno de los personajes, consiguiendo ensamblar la historia
de un modo coherente y sin que el interés decaiga en ningún momento.
La Frase: Cuando las preguntas empezaron a
fluir comprobé dónde estaba el fallo. A pesar de que todas ellas eran
diferentes entre sí, yo era más diferente todavía. Después de todo, yo era una
detective. Se me asociaba a gente de los bajos fondos, llevaba pistola, e
incluso --por el amor de Dios-- había matado a un hombre de un tiro. Las
preguntas no cesaban; podía ver la excitación brillando en sus ojos.