LA NOVELA: "Nadie querría morir
orinándose encima. Es mucho peor que morir desnudo, sin un atisbo de dignidad.
Cuando me preguntan cómo me gustaría morir, yo respondo con el vestido de
flores moradas. Es el más bonito que tengo”.
El juego de las sillas, además de un pasatiempo infantil,
es una metáfora de la vida: cada vez, alguno de nosotros se quedará sin sitio,
y deberá abandonar el juego.
El amor, la
guerra, la libertad, la rebeldía… poderosos y eternos dardos que atraviesan las
vidas de los moradores de un pequeño pueblo. Tres voces femeninas tejen la red
de esta novela: conoceremos a Teresa, Martina y Eulalia en su infancia,
correteando por los adoquines, y en su juventud, con sus ilusiones y rupturas,
y también hoy, asomando, ya ancianas, a través de las grietas de la memoria,
tomando café, cada cual en su silla…
Una novela
de estilizada belleza construida sobre los sentimientos, pero también sobre la
dignidad y sobre el papel reparador de la memoria
LA
AUTORA: Uxue Alberdi
(Elgoibar, 1984), es Licenciada en Ciencias de la Información, escritora y
bertsolari. En esta última actividad, ha obtenido los premios Xenpelar y
Osinalde. Colabora con diversos medios de comunicación.
Artículo aparecido
en el periódico Diario Vasco (http://www.diariovasco.com/) el 19 de octubre de
2012. Redactor: Félix Ibargutxi:
La novela Aulki-jokoa,
de Uxue Alberdi, se ha publicado ahora en castellano, con el título El juego de las sillas, traducida
por Miren Agur Meabe. La obra recoge las conversaciones de tres mujeres
de edad avanzada en una pastelería, que entre otras cosas hablan de su pasado. Mediante la novela se conoce a tres mujeres
en tres épocas diferentes de su vida: la infancia, la juventud y la vejez. Es
una narración fragmentada, como fragmentada es la memoria. Quise contar la
Guerra Civil desde la cocina, y para ello me dediqué a ir a la pastelería 'El
Guetariano', de Getaria, y allí escuchaba las conversaciones de las abuelas y
abuelos. Eso fue hace seis años. Entonces se ocupaban once sillas, hoy apenas
quedan cuatro, dijo la escritora en la presentación.
Uxue Alberdi (Elgoibar, 1984) es más conocida
en su faceta de bertsolari, pero es autora de dos libros de narrativa y también
ha realizado traducciones.
En el libro hay tres narradoras: Teresa, Martina y
Eulalia. En la presentación de ayer, Uxue Alberdi se valió de los
comentarios que en una misiva le hizo el también escritor, pero de literatura
infantil, Pello Añorga. Como me
decía Pello, Teresa nos habla de los riesgos de sobrepasar los límites que te
impone la sociedad. Martina es Marte, es sentimiento, es el sufrimiento de los
corazones débiles. Y Eulalia es la imaginación, es la fantasía como salvación.
Yo creo
-prosiguió la autora el libro- que estas
protagonistas son mujeres de la tercera edad que se resisten a ser manejadas.
No quieren que les manejen, ni siquiera los hijos.
La traducción al castellano ha sido realizada por Miren
Agur Meabe. Me alegré cuando me llamó
Uxue, y me alegré porque la admiraba, dado que ha usado una prosa directa, pero
muy sensitiva y ágil. Hacer esta traducción fue la motivación de cada mañana.
El pueblo, Kantoieta, me recordaba a mi propio lugar de nacimiento, Lekeitio.
Esta novela habla de celos de duración vitalicia, del sentido del honor, del
deseo e las mujeres de salir de la senda marcada, dijo ayer Meabe,
quien además de traductora es escritora con una trayectoria dilatada, que
incluye además el Premio Euskadi.
Por su parte, el editor de la casa Alberdania, Jorge
Giménez, comentó que cuando se habla
de literatura de la memoria, caemos en la trampa de hacer literatura del
recuerdo. Así no se consigue esa urdimbre perfecta del pasado y el presente que
ha logrado Uxue Alberdi. Ha logrado algo que técnicamente es muy difícil.