lunes, 31 de mayo de 2010

PÁJAROS SIN ALAS: RESEÑA EN EL "DIARIO MONTAÑÉS", DE SANTANDER


Artículo publicado en el periódico DIARIO MONTAÑÉS
el 28 de mayo de 2010. redactor: Gerardo Elorriaga.

Aunque tiene un título plenamente 'pulp', nada más lejos. La última novela de José Javier Abasolo es un 'thriller' contemporáneo, situado en este Bilbao del siglo XXI, una ciudad cuya renovación urbanística ha ido borrando meticulosamente todos los escenarios proclives al género negro más tradicional. Además, siempre resulta difícil hallar verosímil una trama policíaca en la ciudad de uno, sobre todo si es pequeña y levemente provinciana. El autor consigue superar ese obstáculo con una historia anclada en la realidad cotidiana, sin desvirtuarla, pero manteniendo las necesarias dosis de intriga. El mayor logro radica en la capacidad para encauzarla a través de dos voces muy diferentes, la local y la extranjera.
El autor mantiene el suspense y, sobre todo, la curiosidad por saber cómo casarán dos desarrollos aparentemente dispares y de qué manera entrecruzarán sus destinos dos protagonistas sin conexión evidente. Abasolo consigue superar la prueba con un 'in crescendo' en el que todas las opciones se van descartando hasta sumir al lector en una extraordinaria incertidumbre, mérito narrativo, sin duda alguna. Curiosamente, tras ese ejercicio de contención, el 'tour de force', tan bien estructurado y dosificado, desemboca en las inmediaciones truculentas del gran guiñol, en un intento de demostrar que siempre hay planos terriblemente sombríos donde sólo podíamos aventurar algún tipo de mercadeo oscuro. La cuestión radica en creer que pájaros tan carroñeros sobrevuelan nuestra ciudad.

EL FANTASMA ENAMORADO (JONATHAN CARROLL)

LA NOVELA: Un hombre cae en la nieve, se golpea la cabeza contra un bordillo de piedra y muere; sin embargo, sucede algo extraño: el hombre no está realmente muerto, y el fantasma que ha sido enviado para llevarse su alma a la otra vida queda estupefacto. Tras acudir de inmediato a su jefe, el fantasma le pregunta qué debe hacer, a lo que el jefe le responde que no sabe cómo ha sucedido, pero que están trabajando en ello. Mientras tanto, desea que permanezca junto al hombre para que puedan averiguar lo que está ocurriendo.
El fantasma acepta de mala gana; es un espectro y no una niñera, sin embargo sucede algo inesperado: se enamora locamente de la novia del hombre y las cosas, obviamente, se complican bastante.

RESEÑAS: Carroll te presta sus ojos para que veas a través de ellos, y te regala el mundo con toda su frescura, honestidad y novedad (Neil Gaiman)
Créannos, si no los sorprende, si no tienen que ir releyendo ante su asombro y parpadeando ante lo increíble de cada página, quizá deberían volver a abrir el libro del otro Carroll, “Alicia..”, para saber a qué nos referimos (El placer de la lectura)
La surrealista mente de este autor neoyorquino siempre consigue dar una sorprendente vuelta de tuerca a su universo personal (Interviú)

EL AUTOR: Jonathan Carroll nació en Nueva York en 1949, hijo de un escritor y una actriz. Se graduó cum laude por la Universidad de Rutgers. En 1971 se casó con la artista Beverly Schreiner y en 1974 se trasladó a Viena para enseñar inglés en la Escuela Internacional Americana.
A mediados de los ochenta dejó la enseñanza para dedicarse a la literatura. Es autor de una veintena de novelas, entre ellas Los dientes de los ángeles, El Museo del Perro (Premio British a la mejor novela del año), El mar de madera, Manzanas blancas y Sopa de cristales, todas ellas publicadas por La Factoría de Ideas. Ha escrito también numerosos relatos, incluido Friend's Best Man, ganador del premio World Fantasy, y de recopilaciones como The Panic Hand (premio Stoker 1996). Sus novelas se han traducido a más de veinte idiomas y entre sus admiradores declarados se encuentran Stephen King, Juliette Binoche, Neil Gaiman y Sting.

LITERATURA ERÓTICA EN EUSKERA

Artículo publicado en el diario DEIA el 31 de mayo de 2010. Redactora: María R. Aranguren.

Del verbo eros procede también la palabra Eroski, que puede significar cualquier cosa, dice Edorta Jiménez entre risas. El escritor vizcaino no quiere restringir demasiado el significado de la palabra erótico y adelanta que para él es todo aquello que produce algún tipo de consecuencia de carácter carnal. Se cita con el periódico en la biblioteca de Bidebarrieta, donde conversa con la escritora Jasone Osoro sobre erotismo, literatura y autores vascos.
Es cierto que todo depende de la mirada. Dos personas leen el mismo texto y a las dos le produce una emoción distinta, coincide Jasone Osoro, autora de obras como Tentazioak (Tentaciones), Korapiloak (Nudos) o Greta. Quizá por eso cuesta tanto comenzar la conversación, porque no existe una categoría clara más allá de las que ofrecen las editoriales cuando agrupan un conjunto de títulos bajo la denominación Literatura erótica. Decía Boris Vian que no se puede definir qué es el erotismo, pero que todos sabemos en un momento dado qué es y qué no es erótico, recuerda Jiménez. En marzo publicó Haragizko amoreak (Amores carnales), un poemario que conecta con la tradición oral vasca y que contiene una gran carga sensual. Muéstrame la otra parte de la manzana asada, lee Jiménez. Esa manzana asada que simboliza la vulva, esa herida con la que significa en un verso la menstruación femenina y esa mención a la Biblia en Dame la leche y la miel de la Tierra Prometida. Hay versos anónimos del siglo XV con este significado profundo y precioso de la manzana en euskera, explica Jiménez. Los elementos naturales están muy presentes en el cancionero popular vasco cuando se habla de sexo.
Jasone Osoro, que escucha atenta, nombra Korapiloak, su segunda novela. Fue una experiencia interesante pero también difícil, recuerda. El título hace alusión a la vida, que es una cuerda llena de nudos. Conforme uno suelta esos nudos, va quedando desnudo con sus vivencias, con sus temores. Hay una serie de pasajes eróticos, aunque fue un libro muy diferente a Tentazioak. La dificultad no estribó en la creación de la obra, sino en las etiquetas que ya le habían colgado por escribir un libro con altas dosis de erotismo.
Cuando presenté este libro indicaron desde distintos foros que yo era una mujer joven. Dos etiquetas que, junto con la del sexo, siempre han estado relacionadas conmigo, cuenta con rabia. "Hasta tal punto que cuando escribí Greta un medio de comunicación llegó a resaltar que ese no era un libro erótico.
Edorta Jiménez la defiende: Cuando leí Tentazioak lo que sentí es que no había un libro como ese antes en la literatura vasca. Para el autor, la misoginia ha estado muy presente en el gremio de los literatos vascos. Una mujer puede ser abuela y la seguirán llamando joven escritora. Tengo amistad con Mariasun Landa y es un claro ejemplo de la soledad que a veces puede llegar a sentir la escritora vasca, en este caso con el estigma de que ella crea literatura infantil. Sin embargo, todo el que la haya leído conoce el gran nivel que caracteriza su trabajo.
La moderadora, Udane Goikoetxea, interrumpe este Encuentro con la Literatura para pregunta si hombres y mujeres enfocan de una manera diferente la escritura de pasajes eróticos. Cada uno escribe desde su experiencia, desde lo que ha vivido, pero está claro que vivimos de una forma distinta la sexualidad. Los referentes culturales son distintos todavía, replica Osoro.
Ambos comparten un problema: los referentes son pocos. En euskera hay libros pero todavía no hemos conseguido llegar al aeropuerto de Loiu, indica Jiménez. Cuando leí que se había organizado el primer Euskalsex y que se había traducido por primera vez una primera película erótica al euskera me reí mucho. Nuestro idioma escrito tiene muchas carencias. Edorta Jiménez se refiere a la frecuencia con la que se usan las palabras y Jasone Osoro coincide en su tesis. Hay un lenguaje todavía por trabajar, por elaborar. Algunas palabras no se utilizan en el idioma hablado así que cuando se ponen en el papel suenan raro, ejemplifica la escritora.
Sin embargo, cada vez resulta más complicado hablar de erotismo. El escritor siente mayor libertad para reflejar estas cuestiones y el erotismo aparece de una forma más normalizada, apunta Osoro. En Las 11.000 vergas, de Apollinaire, el prologista de la edición en castellano alude a la dificultad que supone la traducción porque el castellano no tiene la riqueza que tiene el francés por la influencia del franquismo, dice Jiménez. Para encontrarla en el euskera hay que regresar a las baladas, aunque a veces también te encuentras que alguno ha metido mano.

EL DÍA DEL JUICIO (THOMAS F. MONTELEONE)

LA NOVELA: La «nueva Iglesia para el nuevo milenio» del papa actual sorprende y seduce a millones de fieles. Las facultades del papa Peter Carenza van más allá de resucitar a los muertos y sanar a los enfermos. Fruto de una conspiración vaticana secreta para provocar el Segundo Advenimiento, Carenza es también mucho más de lo que los conspiradores habían imaginado.
Solo tres personas conocen la verdad sobre el nuevo papa: la mujer que una vez lo amó y que conoce su verdadera naturaleza, un arzobispo que no confía en él a pesar de sus milagros, y la madre de Carenza, una monja de clausura que realmente oye la palabra de Dios.

RESEÑAS: Esta es la aportación de Monteleone al género de la locura del milenio, y el concepto es genial. Su trama es cuidada y excepcionalmente astuta (USA Today)
En la novela abundan los milagros, el misterio, las sociedades secretas, las conspiraciones y las apariciones (Literary Times)
Ambiciosa… Monteleone combina una impresionante cantidad de datos históricos y religiosos con una narrativa ágil y controvertidas preguntas sobre fe y filosofía (Publishers Weekly)
Un libro poderoso, perturbador y maravilloso. Este año debería estar en la lista de la compra de todo el mundo (Book Sense)

EL AUTOR: Thomas Monteleone cursó sus primeros años con los jesuitas, y después se licenció en Psicología y en Literatura. Ha escrito más de veinte novelas; entre ellas destacan Lyrica, Tren nocturno, La galería magnífica, que fue adaptada para la televisión y La sangre del cordero, publicada en La Factoría de Ideas.
Monteleone es cofundador de un sello para producir ediciones limitadas de los mejores trabajos de ficción creativa.
Su obra ha sido traducida a más de diez idiomas.

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 188.-CUARENTA MANERAS DE DECIR DOLOR (GILES BLUNT)


Título: CUARENTA MANERAS DE DECIR DOLOR
Título original: FORTY WORDS FOR SORROR
Autor: GILES BLUNT
Editorial: RBA
Trama: En Algonquin Bay, pequeña ciudad canadiense cercana a Ontario, aparece el cadáver de una joven, casi adolescente, brutalmente asesinada y torturada. Esa muerte, junto a la desaparición de varios adolescentes más, obliga a las autoridades de policía a dar vía libre a John Cardinal, agente de policía que desde el primer momento sospechó que se encontraban ante un asesino en serie, para que investigue lo sucedido.
Personajes: John Cardinal, policía honrado y competente que sin embargo guarda un secreto acerca de una actuación ilegal en la que estuvo implicado, Catherine, su mujer, ingresada en un psiquiátrico por sus constantes depresiones y problemas mentales, Lise Delorme, compañera de Cardinal, proveniente de la Brigada de Investigaciones especiales (“Asuntos Internos”) que tiene la misión de averiguar si Cardinal es un policía corrupto o no, Musgrave, jefe de la Policía Montada del Canadá, que quiere cargarse a Cardinal por estimar que está vendido a un gángster tras el que también va, Erik Fraser y Edie, él un psicópata que sólo encuentra placer haciendo daño y dominando a los demás, ella, una joven solitaria acomplejada por su aspecto físico, que se entrega a Erik como su única vía de salvación.
Aspectos a Destacar: El conflicto moral del protagonista, policía honrado que en una ocasión se dejó tentar por el dinero fácil, lo que no le deja vivir tranquilo consigo mismo / Su ambientación en una zona de Canadá en casi perpetua helada.