El salón de la embajada italiana lleva menos de un mes en librerías y hace días empezó a meterse en las listas de los diez libros más vendidos. Su autora, la bilbaína Elena Moreno, está encantada con la noticia, y no quiere dejar de agradecerle al público lector que haga un sueño realidad. Gracias a los lectores cada día veo más cerca la posibilidad de vivir de la literatura, explica la autora de la última apuesta del grupo Planeta, en su editorial Temas de Hoy.
En el cajón aguardan su turno otras historias ya escritas, esas a las que ha ido dando forma compulsivamente» cuando ha podido, entre el trabajo y la familia. Y es que Moreno tenía sus ojos puestos en la literatura mientras iba haciendo todo lo demás.
Carmela, la protagonista casi absoluta de El salón de la embajada italiana, también. Ella es de mi generación, una generación que rompió moldes. Nos maleducamos en el franquismo, Mayo del 68 nos pilló de niñas y no pudimos aprovecharlo. Sin embargo, la caída del Muro de Berlín nos cogió ya con hijos y con las piernas enredadas.
Son mujeres que han visto cómo cambiaba el mundo occidental, pero que no han podido hacer uso de la libertad que tanto se anunciaba porque apenas tenían tiempo para sí mismas, ya que andaban cuidando de los maridos y los hijos.
La libertad es el gran tema de la novela. La posibilidad de elegir. Y aquello con lo que tiene que ver: la lealtad y por lo tanto la renuncia. Habla del amor, que te enreda las piernas. De la pasión, de la familia, de las grandes emociones de la vida. He sido muy ambiciosa, reconoce la escritora bilbaína.
Carmela encuentra en su tía Carmen un espejo en el que mirarse; irá descubriendo, como un misterio, que la tía vivió una época aún más restrictiva y aun así decidió realizar su vida a su manera. Es cuestión de darse ánimos y lanzarse a la piscina. Es lo que aprende Carmela. A perseguir su sueño hasta el final, a «reinventarse». Nosotras elegimos, y elegimos lo que elegimos. La generación de mi hija es distinta; va bien enseñada, pero yo tengo mis dudas. ¿No llegará el príncipe azul y ella relegará su vida profesional?, se pregunta la escritora.
En la novela se cuela también todo el aire del norte, con escenas familiares muy de aquí, las sagas comandadas por mujeres, los paisajes marineros de ahí al lado, el viento y la lluvia, y la realidad de quien habita el País Vasco. Además de la vida de esas dos mujeres marcadas por la historia hay un retrato costumbrista, explica Moreno.
Todo ello hace que los lectores se sientan identificados con la narración. Eso a mí me dice mucho. Cuando alguien me lo cuenta, me siento apoyada. Así que si me veis por la calle y queréis contarme qué os ha parecido, estaré encantada, anima a los lectores que han conseguido que El salón de la embajada italiana tenga ya una segunda edición.
LA NOVELA: El día que su tía fallece, Carmela, periodista y escritora, rememora la libertad y sofisticación que esa mujer de origen italiano, relacionada con la diplomacia internacional, le quiso inculcar y que con el tiempo quedaron sepultadas bajo el peso de las responsabilidades familiares.
Meses antes, la apacible e insatisfecha vida de Carmela se tambalea cuando Mateo, un atractivo hombre de negocios, aparece en Bilbao para hacerle un extraño encargo por el que está dispuesto a pagar cualquier precio: investigar y redactar la biografía de su padre, muerto tiempo atrás.
El desconcierto asola las primeras entrevistas con Mateo, pero una serie de acontecimientos le dará fuerza para descubrir no solo los misterios que parecen rodear el encargo, sino aquellos que comienza a sentir en su corazón. A partir de ese momento, Carmela intuirá que la vida no tiene por qué construirse sobre renuncias, que la lealtad puede romperse, que la historia esconde secretos que deben ser confesados y que todas las libertades tienen un precio. Las claves para adentrarse en ese mundo las encontrará en la vida de su tía.
LA AUTORA: Elena Moreno, nacida en Bilbao, es licenciada en Ciencias de la Información por la universidad de Bellaterra (Barcelona). Ha trabajado en medios de comunicación como Eitb (Radio Euskadi, Euskal Telebista), Cope, Punto Radio y Canal Euskadi. Colabora habitualmente en prensa escrita y ha ganado varios premios de relatos literarios. El salón de la embajada italiana es su primera novela.
bien elena ya estoy con ella
ResponderEliminarelena he leido el libro y me gustaría que me lo firmaras tú tienes mi telefono, yo no tengo el tuyo. Nos vimos cerca del museo y tomámos un caldito. alberto
ResponderEliminar