II ENCUENTROS DE NOVELA CRIMINAL LAS CASAS AHORCADAS (CUENCA)

Los pasados días 25 y 26 he estado en Cuenca, viviendo los II Encuentros de Novela Criminal Las Casas Ahorcadas. Viviendo, participando y, sobre todo, disfrutando.

Tuve que adelantar la marcha, por lo que me perderé los actos que se celebran hoy domingo, como la presentación Con todo el odio de mi corazón, de Fernando Cámara, ganador del Premio García Pavón. En la comida del sábado coincidimos con Mariano Sánchez Soler, también ganador, lo mismo que yo, de ese premio. Nos lo pasamos genial contando anécdotas.

También tendré que perderme la presentación de Claudio Cerdán por el propio Mariano, la entrega del "Tormo Negro" a Víctor del Árbol y la última actuación musical de Javier Márquez.

Una pena perdérmelo, es cierto, pero como pude estar y disfrutar con todos ellos la pena se aminora, aunque no desaparezca. Y no sólo con ellos. Con el gran Paco "No somos Ná" Gómez Escribano coincidimos Jon Arretxe y yo en el AVE Madrid-Cuenca. El resultado fue que pasamos todo el trayecto en el bar del tren. Incluso insinuamos que ya que no habíamos ocupado nuestros asientos deberían habernos devuelto el importe de los billetes, pero no atendieron nuestra justa reivindicación. Y es que Paco tiene razón, no somos ná.

Pude conocer a un montón de gente del club de lectura de "Las casas ahorcadas", que me atendieron estupendamente y algunos hasta llegaron a emocionarme al explicarme lo que habían sentido leyendo La última batalla. Estuve con Claudio Cerdán, el autor de un novelón como Cien años de perdón y me presentaron a Cecilia Herreros, la librera de JUMI, en Madrid, donde Paco presentó Yonqui, guitarra en ristre (ese detalle hizo aumentar mi admiración por la librera). Alexis Ravelo volvió a confirmarme que si las Canarias son de verdad las Islas Afortunadas es porque cuenta con excelentes escritores y personas como él y, en definitiva, que fueron dos días estupendos.

Lo malo de andar citando a la gente es que siempre te olvidas de alguno, así que mencionaré a D. José Manuel Ribeiro (el Riber), que sacó la foto que ilustra esta entrada, a Julia Martínez, a la que no conocía en persona y ahora sé lo que me he perdido y a Lorenzo Silva, pregonero de las Jornadas y con quien compartí mesa redonda. Y como a un escritor siempre le conviene hacer la pelota a los editores, pues tengo que decir que fue un placer volver a encontrarme con Gregori Dolz, de Alrevés

Y por supuesto, mi agradecimiento a Sergio Vera y sus padres, que junto al resto del club de lectura, se desvivió para que no sólo yo, sino todos los asistentes, estuviéramos atendidos de modo inmejorable, así como a África Cotillas, de la Diputación de Cuenca.

Pero antes de acabar esta entrada, que me está saliendo más próxima a una crónica social que a otra cosa, debo recalcar que lo importante, sobre todo, eran los libros y sus autores. En mi maleta me traje unos cuantos de los escritores que ya he mencionado (aunque a la mayoría de ellos ya los había leído), pero estando en Cuenca, y por recomendación de gente en la que confío, me compré el primer libro de Antonio Santos, un escritor conquense que ha empezado a publicar en una editorial prestigiosa como Alrevés, lo que parece un aval de su calidad. El libro se titula Los casos de Mauricio Romero, y no lo edita Alrevés sino "Editorial Alternativa Luz de Luna". Como los de Alrevés son fáciles de encontrar en Bilbao me decidí por ese libro. Ya os contaré, pero la primera impresión ha sido muy buena. Así que nada, hasta el año que viene en Cuenca.