domingo, 31 de enero de 2021

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 797.-LOS PAPELES DE TONY VEITCH (WILLIAM McILVANNEY)

Título: LOS PAPELES DE TONY VEITCH

Título original: THE PAPERS OF TONY VEITCH

Autor: WILLIAM McILVANNEY

Editorial: SALAMANDRA

Colección: SALAMANDRA BLACK

Trama: Que un alcohólico de avanzada edad acabe muriendo de un modo solitario en un hospital de Glasgow es algo que no extraña a nadie. Incluso si parece que ha sido asesinado, ya que eso, en realidad, lo único que habría hecho sería acelerar en unos pocos días o semanas un suceso que todo el mundo preveía. Salvo que tome cartas en el asunto el único policía de la ciudad que cree que todas las víctimas tienen el mismo derecho a que se les haga justicia.

Personajes: Jack Laidlaw, inspector de la Brigada de Homicidios de Glasgow, que aún cree en su trabajo y siempre busca lo que está más allá de la verdad aparente, Mickey Ballater, viejo matón de Glasgow que, aunque hace tiempo que se fue, vuelve a su ciudad natal atraído por la posibilidad de hacerse con una buena cantidad de dinero, Milligan, policía de Glasgow, no muy amigo de Laidlaw y más pragmático y contemporizador que éste, Linsey Farren, joven aristócrata atraída por el lado oscuro de la ciudad, Cam Colvin, uno de los líderes de la delincuencia en Glasgow, que no se anda con contemplaciones si alguien o algo lo molesta, Macey, confidente de la policía que se codea con lo más “selecto” del crimen organizado de la ciudad, Brian Harkness, joven ayudante de Laidlaw, al que en cierto modo admira aunque no siempre le comprenda ni esté de acuerdo con lo que hace, Dave McMaster, uno de los hombres de Cam Colvin, amante de Linsey Farren y seducido por el “nuevo mundo” que ésta le enseña, Bob Lilley,compañero y amigo de Laidlaw, al que intenta hacer volver a la realidad cuando se pierde en sus divagaciones.

Aspectos a Destacar: La presente novela es la segunda de la trilogía dedicada a Laidlaw, con la que McIlvanney puso los cimientos de la novela negra escocesa, lo que ha sido llamado el “tartan noir” / El humanismo que desprende la historia y su personaje principal, lo que le acerca a alguno de los clásicos del género como Raymond Chandler.

La Frase: Todos importaban; o todos o ninguno. Se acordó que de adolescente se esforzaba en afrontar las cuestiones trascendentales de la existencia como si nadie lo hubiera hecho antes. Desde la fase “¿Por qué estamos en el mundo?”, por así decirlo. A veces andaba por la vida como si llevara escrito en la frente la pregunta del día: ¿Existe un Dios? ¿Cuál es el sentido de la vida? Hoy podía sonreír al recordarlo, pero la suya era una sonrisa de tristeza.


martes, 26 de enero de 2021

EL SITIO DEL FIN DEL MUNDO (PABLO BARRIO)

LA NOVELA: En La Flamenka, una vieja taberna situada junto al muelle de una recóndita aldea de pescadores, un joven viajero aguarda a que amaine la tempestad antes de seguir su camino. Como es el único cliente en ese momento y, además, guapo, “pero guapo, guapo”, la tabernera, anciana ya, aunque de inusitado vigor, aprovecha la ocasión para tentarlo, mientras le relata cómo, siendo ella una joven pirata, su barco fue perseguido por la flota del rey hasta acorralarlo en los confines “donde la mar se sobra de sus bordes y cae a lo profundo”. Es decir, el sitio en el que los mapas de aquel tiempo decían: “¡Alto aquí, navegantes! Que en este punto se acaba lo plano y quien dé un paso más acabará despeñado en el abismo sin fondo, habitado por bestias ansiosas de devorar los cuerpos y las almas de los incautos que osen asomarse”.

El Sitio del Fin del Mundo es una fábula libertaria repleta de humor que bebe del mito romántico que ve en el pirata --en este caso en la pirata-- no a un malhechor sino a alguien que se rebela contra las normas establecidas por los poderosos.

 

EL AUTOR: Nacido en Agurain (Araba/Álava) en 1958, desde niño reside en Lasarte-Oria (Gipuzkoa). Licenciado en Ciencias Empresariales, ha trabajado en la enseñanza.

El año 2003 Euskaltzaindia (Academia de la Lengua Vasca) le otorgó el premio Toribio Altzaga de Teatro por Ama, hor al zaude?, en la que aborda la problemática de la inmigración a través de la historia de una madre y su hija enferma, envueltas en el bienestar occidental.

En 2006 recibe el Premio de Textos Teatrales para Niños de la Escuela Navarra de Teatro y del Ayuntamiento de Iruña por Abere hatsak eta beste animalia batzuk y en 2007 vuelve a repetir el mismo premio con Herio azeri hori.


 

viernes, 22 de enero de 2021

BAJO SOSPECHA (ANA ISABEL CABANILLAS LUZURIAGA)

LA NOVELA: Roberto Godoy era un conocido futbolista del Estudiantes de Magallanes, club que luchaba por alzarse con el campeonato liguero aquella temporada. Considerado como la gran estrella del equipo, vivía continuamente bajo la presión de los medios de comunicación y de los aficionados.

Sin embargo, todo esto cambia el día en el que escucha por casualidad una conversación que jamás debió ser oída. A partir de ese momento, la idea de una posible corrupción en el seno de su entidad comienza a rondarle la mente, hasta que la trama se complica y surgen los primeros enfrentamientos.

Fútbol, prensa, drogas y amistad hacen un buen cóctel en esta obra que enganchará al lector desde el principio, tanto si es amante de los deportes como si no.

 

LA AUTORA: Nacida en Bilbao centro, Ana Isabel Cabanillas Luzuriaga creció en San Antonio (Etxebarri), donde era fácil verla jugando en la calle con los chicos y las chicas de su barrio.

Licenciada en Economía y Máster en Marketing Executive, siempre ha compaginado estudios y trabajo con su gran pasión: el fútbol. Ha sido jugadora federada durante veintiún años, entrenadora de fútbol escolar y colaboradora en el periódico Cantera Deportiva.


 

jueves, 21 de enero de 2021

HOMBRES QUE CAMINAN SOLOS (JOSÉ IGNACIO CARNERO)

LA NOVELA: Si es cierto que las historias nos salvan, esta es la historia de alguien que se salvó contándola. Es el relato de una depresión, de un vacío repentino en la vida de un hombre que bajo la mirada del autor se convierte en un trasfondo luminoso para hablar de lo importante, de todo aquello que se siente y no se dice.

Este viaje al fondo de una enfermedad que aún se nombra en voz baja nos habla de un padre, de un hijo y de todos los que les rodean. Nos habla de un enamoramiento transatlántico, de una misteriosa mujer que calla su dolor, de madrugadas en Buenos Aires y días circulando por carreteras secundarias españolas, de un funeral desértico en Cádiz o de un vuelo alucinógeno desde la selva amazónica hasta los altos hornos de Vizcaya. Nos habla de la madre fallecida que nunca se ha ido y del padre que siempre está ahí, de lo frágil de la masculinidad, de sus trampas y sus máscaras.

 

EL AUTOR: José Ignacio Carnero (Bilbao, Bizkaia, 1986) es licenciado en Derecho Económico por la Universidad de Deusto y actualmente ejerce como abogado en Barcelona. Ha publicado una crónica de viajes titulada La luz de Lisboa y la novela Ama.


 

martes, 19 de enero de 2021

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 796.-LA CORDURA DEL IDIOTA (MARTO PARIENTE)

Título: LA CORDURA DEL IDIOTA

Autor: MARTO PARIENTE

Editorial: VERSÁTIL

Colección: OFF VERSÁTIL

Trama: El suicidio de un viejo con fama de loco no despertará las sospechas de nadie, ni siquiera la de su único amigo, el jefe de policía de un pequeño pueblo manchego, más preocupado por las vicisitudes de una hermana a la que siempre, sobre todo desde que acabaron en un orfanato, ha estado muy unido. El problema es que su hermana debe mucho dinero a un peligroso delincuente que controla la droga que se mueve en la zona y no sabe cómo va a poder pagárselo.

Personajes: Toni Trinidad, jefe (y único componente) de la policía de Ascuas, un tipo tranquilo y acomodaticio en general, con fobia a la sangre lo que no le impide ejercer su profesión en un pueblo en el que nunca pasa nada, Vega, hermana de Toni, alcohólica, yonqui y mujer maltratada por un exmarido misteriosamente desaparecido, el Colmenero, capo de la droga que se mueve en la comarca, de carácter violento, Rocha, inspector de policía que anda detrás del Colmenero, al que quiere cazar sea como sea, Trejo, hombre del Colmenero y confidente de Rocha, lo que le obliga a andar permanentemente entre dos aguas, los hermanos Maquénroe, matones de confianza del Colmenero, antiguos leñadores de origen vasco fans de “Mecano”, que se dieron cuenta de que se ganaba más dando leña que cortándola.

Aspectos a Destacar: La habilidad del autor para ubicar una trama negra y extremadamente dura en un ambiente rural, en el que aparentemente nunca sucede nada, y con unos personajes alejados de los tópicos de la novela negra aunque perfectamente reconocibles, en lo que podría considerarse una versión autóctona del “country noir” / Con esta novela su autor ha ganado los premios Novelpol y Cartagena Negra 2020.

La Frase: Si aquello iba de tipos duros, debí defraudarlo, pues le dediqué la que yo suponía era la mejor de mis sonrisas. Y así estuvimos como dos imbéciles cerca de un minuto. Y lo sé, lo sé. Soy consciente de que es difícil sonreír y sostener la mirada de cualquiera durante ese tiempo. Pero ese soy yo, el típico policía cercano, campechano y sompático de pueblo. Claro, que todo era un paripé.


jueves, 14 de enero de 2021

FICHERO DE NOVELAS NEGRAS: 795.-EL SHOW DE LAS MARIONETAS (M. W. CRAVEN)

Título: EL SHOW DE LAS MARIONETAS

Título original: THE PUPPET SHOW

Autor: M. W. CRAVEN

Editorial: ROCA

Trama: Cuando a un policía suspendido temporalmente le ofrecen reincorporarse para participar en la investigación sobre unos asesinatos en serie ocurridos al norte de Inglaterra, en una zona fronteriza con Escocia, su primera reacción es negarse, pero cambiará de opinión cuando su nombre aparezca unido al de uno de los asesinados y desee averiguar el motivo. Ya que no conoce a ninguno de los asesinados, ni tiene la misma edad que ellos ni pertenece a su esfera social y jamás se ha cruzado con ninguna de las víctimas ni en el plano profesional ni en el personal.

Personajes: Washington Poe, inspector de policía suspendido de empleo y sueldo, indisciplinado e intuitivo, Tilly Bradshaw, joven analista que trabaja para la policía, un genio informático, pero incapaz de relacionarse socialmente, Stephanie Flynn, inspectora de policía, actual jefa de Poe aunque anteriormente fue su subordinada, lo que le hace recelar de él, seria y reglamentista, Gamble, inspector de la localidad en la que ocurrieron los asesinatos, por lo que no le gusta la intervención de los policías enviados desde Londres, Kylian Reid, antiguo compañero de Poe destinado en la localidad en la que ocurrieron los asesinatos, el único que parece simpatizar con él, Van Zyl, jefe de Poe, que pese a tener que navegar entre compromisos políticos parece apoyarlo.

Aspectos a Destacar: Con esta primera entrega de la serie dedicada a Washington Poe el autor ganó el Premio Gold Dagger, uno de los más prestigiosos de Gran Bretaña y que es otorgado por la Asociación de Escritores de Crímenes del Reino Unido.

La Frase: Poe pensó en lo mucho que se parecían a las dos formas de resolver un asesinato complejo. Una eran Gamble y Flynn, que construían el caso metódicamente, piedra a piedra. De forma minuciosa y reflexiva. Y por otro lado, había policías como Reid y él. Más instintivos. Metían piedras en huecos, las giraban una y otra vez hasta que encajaban. Probando con ideas distintas. Y, aunque Poe sabía que su lado del muro se derrumbaría sin el que Flynn y Gamble estaban levantando, también sabía que algunos casos nunca se resolverían sin su lado del muro.


miércoles, 13 de enero de 2021

LOS AUSENTES (JUANA CORTÉS AMUNARRIZ)


LA NOVELA
: País Vasco, 2007. Tras el fracaso de la última tregua, ETA prepara un nuevo golpe para demostrar su cuestionada fortaleza. Dos encapuchados secuestran a punta de pistola a Bixen Alzola, profesor de universidad y defensor de la vía pacífica como única alternativa para solucionar el conflicto vasco. Cuando su mujer, Leire, recibe la llamada de la organización terrorista reivindicando la acción, siente que su mundo se resquebraja. Sabe que las posibilidades de que su marido salga indemne son mínimas. Durante esa larga noche, Leire toma una decisión: hará todo lo que esté en su mano para salvar la vida de su marido.

¿De qué será capaz? ¿Hasta dónde está dispuesta a llegar? Y ¿qué precio va a pagar por ello? Porque ya nada será igual. No hay vuelta atrás. Nunca la hay cuando se traspasan ciertos límites.

 

LA AUTORA: Juana Cortés Amunarriz, Hondarribia (Gipuzkoa), 1966, es licenciada en Filosofía y escritora de relato, novela y literatura infantil y juvenil. Reside en Madrid, donde inicia su trayectoria literaria en 2004. Ha obtenido diversos premios de relato, entre los que destacan el Segundo Premio Hucha de Oro, el Gaceta de Salamanca, el Premio de Relato Tomás Fermín de Arteta, el Leopoldo Alas Clarín o el Ignacio Aldecoa. Ha publicado los libros de relatos Queridos niños (Premio Ciudad Alcalá de Narrativa 2009) y Las batallas silenciosas. Entre sus novelas está Las sombras (Premio Tiflos 2015). En literatura infantil y juvenil ha publicado Esmeralda y yo (Premio Ciudad de Málaga 2016), Corazón, mano, corazón (Premio Avelino Hernández 2012),Maimón, Ojos azules y la serie Superpaco.


 

lunes, 11 de enero de 2021

ENCICLOPEDIA DEL FRACASO (JOSÉ FERNÁNDEZ DE LA SOTA)

LA OBRA: Esta es la obra cumbre de un poeta de referencia en el País Vasco, un escritor que por su fuerza y su originalidad ocupa un lugar único en la poesía en castellano. Diario poético y cuaderno de viajes, crónica y reportaje de una década de incertidumbres, indignaciones y perplejidades que pueden desembocar en largos textos o en breves meditaciones líricas. Porque de todo hay en esta Enciclopedia del fracaso que compendia la escritura --y la vida-- de José Fernández de la Sota a lo largo de los últimos 12 años. Años de crisis y de literatura y años también de cine documental en diferentes países de Latinoamérica que dejarán su huella, como se puede comprobar en muchos de los textos de esta Enciclopedia que recala en Colombia, México, El Salvador, Perú, Uruguay o Bolivia. Entradas en las que junto a los poetas que siempre acompañaron a su autor (Juan Ramón Jiménez, Claudio Rodríguez, Caballero Bonald, Blas de Otero o Carlos Edmundo de Ory), entran en cuadro cineastas admirados como Orson Welles, Alain Resnais, Pier Paolo Pasolini, Bela Taar, Lars Von Trier o Roy Andersson. Una mirada crítica, a veces inclemente y siempre irónica a nuestra realidad política y social, y también --por qué no-- a la nueva realidad cultural surgida alrededor de las redes sociales y la llamada industria cultural. Y la constatación de que el fracaso es tan inevitable como hermoso y fecundo puede llegar a ser.

 

EL AUTOR: José Fernández de la Sota (Bilbao, Bizkaia, 1960) es autor de una veintena de libros entre poesía, narrativa y ensayo. En dos ocasiones --1997 y 2010-- ha sido galardonado con el Premio Euskadi de Literatura. En 2011 fue finalista del Premio Nacional de Poesía con su libro Travesía de Bilbao. Entre su obra destacan los poemarios Te tomo la palabra (Premio Alonso de Ercilla y finalista del Premio Nacional de la Crítica), Todos los santos (Premio Internacional Antonio Machado), Cumbre del mar (Premio Alfons el Magánim), Vacilación, Aprender a irse (Premio Ciudad de Córdoba) y los volúmenes de relatos Elefantes blancos, Negrita con diamantes y Suerte de perro (Premio Iberoamericano Cortes de Cádiz). En 2009 publicó el ensayo biográfico Juan Larrea, versión terrestre. Ha codirigido el largometraje documental Pido la paz y la palabra y parte de su obra ha sido traducida al francés, portugués, ruso y árabe.


 

LA DECISIÓN DE JUANA MIR (ASCENSIÓN BADIOLA) - RESEÑA

En una de sus canciones, la titulada “Navarra tiene cadenas”, el cantautor navarro Fermín Valencia nos dice que la historia la hace el pueblo y la escriben contrabandistas. Y en muchas ocasiones, si sustituimos la palabra “contrabandistas” por vencedores o versión oficial --aunque en realidad no sea necesario efectuar esa sustitución--, no nos queda más remedio que estar de acuerdo.

Pero no se trata tan sólo de que la historia esté edulcorada, o directamente falsificada, a conveniencia de unos u otros, sino de qué es lo que se realza de cualquier periodo estudiado. Y normalmente los historiadores nos hablan de las grandes batallas, de los hechos más significativos de un país o de los próceres (o antipróceres) de la patria, pero casi nunca de aquellas personas insignificantes, normales, sencillas, que vivieron, y en muchas ocasiones sufrieron, esos grandes hechos que suelen pasar con letra mayúscula a los libros de historia.

Uno de esos hechos históricos que por cercanos, tanto en el tiempo (aunque casi haya transcurrido un siglo) como por las consecuencias que aún perviven entre nosotros es el de la guerra civil española. Muchos conocemos, o creemos conocer, los episodios más sonados e importantes, la batalla del Ebro, la defensa de Madrid, el bombardeo de Gernika, la represión posterior contra los vencidos o el asesinato de García Lorca. Pero hay muchas historias más, tal vez con minúscula, que merecen ser rescatadas. Eso es lo que ha hecho Ascensión Badiola en su novela “La decisión de Juana Mir”, ganadora del premio de novela Ramiro Pinilla 2020.

Badiola utiliza a un personaje real, la propia Juana Mir, para crear su novela. Juana Mir fue una periodista navarra, criada en Bilbao, que consiguió tener una columna titulada “La mujer escribe” en el periódico “La tarde”. En la novela la autora recrea libremente, aunque con un respeto y una sensibilidad exquisita, lo que pudieron ser los últimos días de su protagonista. Una mujer que siempre había deseado triunfar en un mundo de hombres pese a los obstáculos que tenían en aquella época. Una mujer que pese a ser católica y de derechas, o quizás por su modo de ver lo que tenía que significar ser católica y de derechas, denunció desde su columna los horrores del bando sublevado. E incluso pretendió sin conseguirlo (la censura no era patrimonio de un solo bando) denunciar los excesos del bando republicano al que aún se sentía afín.

Juana Mir, el personaje, y seguramente también la persona real en su momento, oscila durante toda la novela entre un optimismo que le invita a soñar con que no va a ser víctima de la represión ya que no ha hecho nunca nada malo ni deshonesto y un realismo que le dice que quienes están ganando la guerra desconocen lo que es no ya la justicia, sino ni siquiera la compasión. Y a pesar de eso sigue luchando contra todo aquello que cree que está mal o es denunciable. E incluso cuando ya percibe que van a detenerla y juzgarla en lo que no va a ser más que una farsa, hace un canto a la vida.

Personalmente desconocía la existencia de esta mujer como desconozco, me temo, la existencia de muchas otras personas que vivieron y sufrieron no sólo en esa guerra sino en muchas otras situaciones descritas por unos libros de historia en los que no aparecen. Por eso, aparte de por haber leído una novela muy interesante, recomendable y bien escrita, le estoy agradecido a la escritora, porque a partir de ahora ya conozco un poco más de una de esas personas que hacen que no perdamos del todo la fe en la humanidad.

NOTA FINAL

La autora, al final de la novela, reproduce seis artículos de Juana Mir que fueron leídos y presentados como pruebas en el Consejo de Guerra al que la sometieron. Se trata de artículos que podrían haber sido suscritos por cualquier persona decente, ya sea de derechas o de izquierdas, o sin ideología concreta, pero que para el tribunal sentenciador fueron motivo suficiente para condenarla a muerte. Afortunadamente, aunque sólo sea de un modo literario, Ascensión Badiola ha sido capaz de recuperarla para que sepamos quién fue, lo que hizo y, sobre todo, por qué la condenaron, aunque hoy en día esa condena nos parezca no sólo atrozmente injusta sino inexplicable.


 

sábado, 9 de enero de 2021

UNA TUMBA EN JERUSALÉN (JOSÉ JAVIER ABASOLO). SINOPSIS


Os dejo la sinopsis de mi nueva novela, UNA TUMBA EN JERUSALÉN. En esta ocasión no aparece Goiko, pero confío en que Claude Larrouy también sea merecedor de un hueco en vuestras estanterías.

Durante la II Guerra Mundial, en el marco de un intento nazi por granjearse la colaboración del nacionalismo vasco, Claude Larrouy, un agente de los servicios de información del gobierno del lehendakari Agirre en el exilio, se infiltra en la comisaría de Baiona. Desde su puesto, averigua la identidad de un grupo de oficiales de las SS que asesinan brutalmente a mujeres. Terminada la contienda, Larrouy solo tiene un objetivo, localizarlos y matarlos a todos. Y es lo que, con la colaboración del Mossad, ha hecho a lo largo de tres largas décadas. Ahora, en 1973, se encuentra en Madrid, dispuesto a acabar con el último de la lista. Pero no va a ser fácil, pues es la mano derecha en la sombra del delfín de Franco, el almirante Luis Carrero Blanco, que acaba de ser nombrado presidente del gobierno.




UNA TUMBA EN JERUSALÉN (JOSÉ JAVIER ABASOLO). EL CONTEXTO HISTÓRICO

Una tumba en Jerusalén es una historia de ficción, pues se trata de una novela, y las novelas, por definición, son obras de ficción. Ahora bien, cuenta con un trasfondo histórico. En estos casos, el lector o la lectora raramente pueden eludir la tentación de preguntarse si determinados hechos que se narran sucedieron en algún momento o si tal o cual personaje se basa en personas que realmente existieron. En definitiva, dónde están los límites entre la ficción y la realidad o, más exactamente, la historia.

El trasfondo de Una tumba en Jerusalén está integrado básicamente por tres escenarios históricos: el intento por parte de determinados jerarcas del III Reich de atraer a su causa al nacionalismo vasco, en el marco de la II Guerra Mundial; la caza y captura a la que fueron sometidos muchos de los nazis huidos tras la rendición de Alemania, con independencia del país en el que se hubieran refugiado, y los (pen)últimos años del franquismo. Veamos uno a uno estos escenarios.

El III Reich pretendía establecer un Nuevo Orden en Europa, para lo cual necesitaba aliados. Contó con muchos, muchísimos. Por una parte, porque las ideas totalitarias no eran exclusivas de Alemania e Italia, y existían fuerzas de corte nazifascista en la práctica totalidad de los países. Por otra, porque, lógicamente, no fueron pocos los oportunistas que apostaron por el que parecía el caballo ganador. Pero, además, hubo jerarcas nazis que, impulsados en parte por sus convicciones etnicistas y en parte por la pura conveniencia, buscaron aliados también en las naciones sin Estado. Y los encontraron, por ejemplo, en Bretaña o en Flandes, pero también en Ucrania o en Georgia, y en otros muchos países. Por ejemplo, las Waffen-SS llegaron a integrar a una legión de indios que peleaban por la independencia de su país, entonces en manos británicas. El axioma “los enemigos de mis enemigos son mis amigos genera a menudo extrañas compañías.

En este contexto, el nacionalismo vasco también fue sondeado sobre la posibilidad de colaborar en la construcción del Nuevo Orden. Y lo fue por iniciativa de Karl Rudolf Werner Best, un oficial de altísimo rango de las SS, en realidad, un general, que había sido ayudante personal de Reinhard Heydrich cuando este estaba al frente de la Oficina Central de Seguridad del Reich, que, entre otros “servicios”, controlaba a la Gestapo. El sondeo no dio frutos, porque, tal y como se explica en la novela, el nacionalismo minoritario, ANV, era de izquierdas y el mayoritario, representado por el PNV-Gobierno Vasco en el exilio, se comprometió desde el primer momento con los Aliados, muy especialmente a través de los “servicios” o Servicio Vasco de Información. Ello no obsta para que alguno de sus militantes, concretamente, Eugène Goyhenetche, practicara, de grado o por fuerza, un doble juego que, terminada la guerra, hizo que purgara cárcel por colaboracionista. Si fue un héroe o un villano es algo que aún sigue suscitando controversia, aunque lo cierto es que fue rehabilitado. En 1968 obtuvo la cátedra de Historia Vasca en la Universidad de Pau y en 1982 la Universidad del País Vasco le otorgó la distinción de “Doctor Honoris Causa".

Un vasco al que también se cita en la novela y que sí fue un colaboracionista notorio, aunque no estaba adscrito a partido abertzale alguno sino a la derecha francesa, fue Jean Ybarnégaray, quien llegó a ser ministro en el gobierno de Vichy. Sin embargo, se distanció y, en 1943, acusado de haber ayudado a diversas personas a atravesar clandestinamente la frontera de los Pirineos, fue deportado al campo de Fussen-Planssee, en Austria. Terminada la guerra, fue condenado en Francia por colaboracionista a la pena de “degradación nacional”, que le privaba del derecho a voto, a ser candidato, a ejercer determinados empleos o a poseer armas. Le fue suspendida precisamente “por acto de resistencia”. 

El segundo escenario histórico que está en el trasfondo de Una tumba en Jerusalén es el de los nazis que, terminada la guerra, se escondieron en diversos países del mundo y la caza a la que fueron sometidos. En la inmediata posguerra, las potencias aliadas se emplearon lógicamente a fondo, tanto para capturar a los jerarcas alemanes del nazismo como a sus colaboradores locales, al tiempo que pugnaban entre ellas por hacerse con los servicios de científicos, como Wernher von Braun, a quien se cita en la novela, o agentes de inteligencia que pudiesen reportarles algún beneficio, aunque ello supusiera tener que mirar a otro lado con respecto al grado de compromiso que habían mantenido con el régimen de Hitler. Pero, sobre todo tras los Juicios de Núremberg, que supusieron el ajuste de cuentas con la cúpula del nazismo, las potencias aliadas se relajaron y el peso de la investigación para localizar a los huidos y documentar los cargos contra ellos quedó muchas veces en manos de particulares, como Simon Wiesenthal, un superviviente de los campos de exterminio.

Es rigurosamente cierto que un ciego llamado Lothar Hermann, con la ayuda de su hija Silvia, proporcionó la pista que permitió al Mossad identificar y localizar en Argentina a Adolf Eichmann, considerado uno de los responsables más directos de la “solución final”. También que el propio Simon Wiesenthal había aportado años antes datos concluyentes al respecto que, por alguna razón, no habían sido tenidos en cuenta. Como Argentina no condecía extradiciones, un comando del Mossad secuestró a Eichmann en 1960 y lo condujo a Israel, donde fue juzgado, condenado a muerte y ejecutado.

También en España se refugiaron prófugos nazis, al amparo del régimen franquista. Uno de los más conocidos fue el belga Léon Degrelle, que, a punto de terminar la guerra, se subió en Noruega a un avión Heinkel y voló hasta amerizar, cuando ya no le quedaba gasolina, en la donostiarra bahía de la Concha. A pesar de que Bélgica, donde había sido condenado a muerte en ausencia, solicitó su extradición, Franco nunca la concedió. Otro de aquellos prófugos fue Otto Skorzeny, muy reputado por sus acciones de comando, como la que llevó a cabo para rescatar a Mussolini cuando este estaba preso en el Gran Sasso. En España, siempre al amparo del régimen, Skorzeny colaboró con ODESSA, red clandestina dedicada precisamente a facilitar la huida a América Latina a exmiembros de las SS, y también con una empresa “de seguridad” dirigida por nazis alemanes creada, entre otras cosas, para apoyar en tareas escabrosas a la Dirección General de Seguridad española.

Y así enlazamos con el tercer escenario que constituye el trasfondo histórico de Una tumba en Jerusalén, el de los (pen)últimos años de la dictadura. Desde la Guerra Civil, Franco había ostentado la doble condición de jefe del Estado y presidente del Consejo de Ministros. En junio de 1973, con su enfermedad ya avanzada, decide dejar este segundo cargo, más ejecutivo, en manos del almirante Luis Carrero Blanco. Era este un hombre de la entera confianza del dictador, su delfín, llamado a ser el encargado de perpetuar el franquismo después de Franco. Controlaba los servicios de inteligencia y también de represión, como era el caso de la Brigada Político-Social. Precisamente un comisario de esta BPS, Melitón Manzanas, con fama de torturador y, por cierto, también de haber colaborado con la Gestapo durante la II Guerra Mundial, había sido en 1968 la primera víctima mortal deliberada de ETA. A su vez, el atentado contra Manzanas había estado en el núcleo del juicio celebrado en 1970 contra la cúpula de esta organización, el llamado Proceso de Burgos, que, paradójicamente, dejó en evidencia que las costuras del régimen empezaban a reventar. Carrero era el hombre llamado a recoserlas. Pero no tuvo tiempo, todo acabó para él apenas seis meses después de haber sido nombrado presidente, el 20 de diciembre de aquel mismo año de 1973. Le sucedió en el cargo el que era su ministro de Gobernación (hoy diríamos de Interior), Carlos Arias Navarro, a quien también vemos en la novela y que ha pasado a la historia como ese señor que, el 20 de noviembre de 1975, se asomó a las pantallas en blanco y negro de los televisores con semblante extremamente compungido para anunciar: “Españoles, Franco ha muerto”.